Mi hijo tiene piojos, ¿cómo es posible?”, se preguntan asombrados muchas madres y padres. Sin embargo, es posible y casi tan común como el resfriado. Que un niño tenga piojos no significa malos hábitos de higiene ni debe ser motivo de vergüenzas.

La proximidad física en las edades tempranas hace a los peques muy vulnerables. De hecho, entre el 5 y el 10% de los niños entre 3 y 10 años han tenido alguna vez pediculosis.

Por suerte, existen tratamientos eficaces contra los piojos que eliminan la pediculosis y evitan el contagio. Basta con tomar medidas y emplear los productos antipiojos adecuados.

 

Piojo: características y hábitos

El piojo es uno de los insectos más comunes en todas las culturas. Habitan solo en los humanos, generalmente en los niños entre 3 y 10 años y también en sus familiares. La enfermedad que producen se conoce como pediculosis.

¿Qué más podemos saber acerca del piojo del cabello?

  • El nombre científico es pediculus humanus capitis
  • Se alimenta exclusivamente de la sangre que succiona a través del cuero cabelludo
  • Vive cerca del área de la nuca y en la zona cercana a las orejas
  • Lo puedes ver a simple vista
  • Necesita una temperatura de entre 28 ºC y 32 ºC
  • Detesta los tratamientos químicos como las decoloraciones, tintes, etc…

El piojo del cabello, pertenece a la familia pediculae. Podríamos decir que sus primos son el Pediculus humanus o piojo del cuerpo y el Pthirus pubis, piojo del pubis o ladilla.

 

Ciclo de vida del piojo

Un piojo vive entre 33 y 35 días. Durante ese tiempo pasa por tres etapas: la liendre, la ninfa y el piojo adulto.

La hembra pone una especie de huevos llamados liendres, generalmente cerca de la base del pelo. Las hembras pueden poner hasta 10 liendres en 24 horas. Si no miras con atención, los huevos parecen restos de caspa adheridos al cabello y su coloración es entre blanca y transparente si el huevo está vacío y marrón o gris oscuro cuando el piojo todavía no ha nacido. Las liendres demoran entre 7-10 días en abrirse y de ellas solo sale un ejemplar del insecto.

Cuando eclosionan, sale una ninfa o piojo joven sin sexo definido y con color blanquecino. Solo un 60 % de los piojos que salen de las liendres llegan a adultos.  Asumen el género de piojo macho o piojo hembra, en función del entorno y para ello demoran unos 9-10 días. También en ese tiempo, desarrolla la capacidad de mimetismo o camuflaje; es decir, que su color se torna similar al del cabello.

Una vez se convierte en adulto, el macho mide de 1 a 2 milímetros y la hembra de 2 a 4 milímetros de largo. No tienen alas y tampoco saltan como las pulgas, pero sus seis patas le permiten desplazarse con rapidez y conseguir un eficiente agarre al cabello.

Cuando el piojo pica, inocula en la piel una sustancia irritante antes de succionar la sangre, por eso dan ganas de rascarse. Si se caen –algo raro–, a las 48 horas mueren. Si consiguen un hospedero no humano y vivo, igualmente a los 3 días mueren.

Aunque el piojo tiene un ciclo de vida corto, si no nos deshacemos de las liendres, la comunidad de piojos no desaparece. Un buen proceso de tratamiento implica:

  • Eliminar los piojos
  • Sacar las liendres
  • Mantener los insectos alejados si estamos en un entorno susceptible

 


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¿Por qué mi hijo tiene piojos?

La pediculosis se adquiere por contacto frecuente con otra persona infestada: si la persona está muy infestada, basta con un beso o un abrazo para coger piojos.

En el colegio los niños pasan el día unos encima de los otros en sus actividades. Lo normal es que la cercanía entre las cabezas durante la convivencia diaria faciliten al piojo pasar de un niño a otro. El contagio a través de la ropa, las fundas de almohadas, los gorros, los peines o los cepillos también es posible, aunque menos común.

El piojo no tiene preferencias o restricciones en cuanto al tipo de cabello o color del mismo. Todos somos susceptibles de ser víctimas de la pediculosis. Como estos insectos son buenos nadadores, no basta con una lavada de cabeza para eliminarlos. De hecho, el piojo prefiere los cabellos limpios. ¿Por qué? Porque en un cabello limpio le es más fácil alimentarse y trasladarse que si tiene que lidiar con caspa, grasas y suciedad.

 

Signos y síntomas de la pediculosis

Los más habituales son:

  • Presencia de piojos vivos y de diversos tamaños
  • Picazón intensa en el cuero cabelludo principalmente en la zona cercana a la nuca (zona occipital) y las orejas (zona retroauricular)
  • Pequeños puntos de enrojecimientos en el cuero cabelludo
  • Huevos de piojos o liendres adheridos a 6,5 mm de la raíz del cabello

Algunas personas no sienten picazón alguna, pero eso no es indicador de que no tengan piojos. Cuando la liendre está adherida al cabello en los extremos, puede ser que la persona estuvo infestada, pero el cabello ha crecido y las liendres han eclosionado.

Ante cualquiera de los síntomas anteriores, lo ideal es hacer una inspección en el cuero cabelludo y tomar medidas de inmediato.

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